El Atleti de Murcia es el Atleti de Madrid

Si Carlos Bianchi tiene ocasión de ver al Atlético ahora, seguro que se dará cabezazos con la cabeza. Pepe Murcia ha demostrado que no hace falta un gran currículo para hacer un equipo de buenísimas hechuras. Tan sencillo como crear un estado de ánimo adecuado, poner en el campo el 'once' que cualquiera imaginaba cuando empezó la temporada, con la gran defensa del año pasado, con Luccin por delante con galones, con Ibagaza llevando el peso, con dos delanteros de mucho movimiento y con dos puñales en las bandas.
El Calderón ha vuelto a disfrutar gracias, en el caso de ayer, a sus tres golazos: el de falta de Antonio López precioso y los de Maxi Rodríguez de un mérito enorme. Dato curioso, el argentino (6) es el máximo goleador del equipo por delante de Torres (5, 2 de penalti) y Kezman (4).
El Deportivo, con el sempiterno sello de Caparrós, no bajó nunca los brazos. Jugó un mal primer tiempo, pero tuvo una gran efectividad en las jugadas de estrategia. Logró devolver los dos primeros golpes rojiblancos, pero el Atlético de Madrid y de Murcia ya no se arruga, ya no es un equipo con historial, es una realidad que ha vuelto. Al menos, así lo sienten sus aficionados que ayer vibraron como hace tiempo no lo hacían.